lunes, 2 de junio de 2014

La expresión escrita en secundaria

La expresión escrita en secundaria

Escogí esta línea para realizar mi trabajo fin de máster a partir del momento en el que hice las prácticas en un centro de secundaria y pude darme cuenta de lo generalizado que estaba el problema, y no sólo el las etapas del primer ciclo de la ESO. Conforme iba pasando por los distintos niveles, puesto que tuve la oportunidad de adentrarme en las aulas de todos los niveles (tanto de la ESO, como de Bachillerato, como los asociados a los talleres de lengua castellana y literatura, planes de diversificación y PCPI), me fui dando cuenta de que se trataba de un problema bastante extendido a lo largo de toda la etapa educativa. La raíz del error se debía a razones de diversa índole, pero, sobre todo, se identificaba en aquellos alumnos que estaban desmotivados o los que no apreciaban ninguna utilidad en lo que respecta al dominio de la competencia lingüística; aquellos alumnos que, a pesar de no presentar ninguna dificultad en lo que respecta a sus capacidades para adquirir dicha competencia, no veían utilidad ni beneficio alguno en escribir bien, ni en qué importancia tenía esto en el desarrollo de su vida cotidiana.

Al tratarse de un problema tan extendido en secundaria, me resultó interesante investigar acerca de él, y, sobre todo, en cómo ayudar a los alumnos para que puedan aprender a expresarse correctamente por escrito. A día de hoy, ya realizada la investigación, puedo afirmar que he aprendido bastante, y que mi elección fue buena, pues, como futura docente, considero que me va a resultar de gran utilidad. A lo largo de mi estudio, también he podido navegar por otros temas que se encuentran ligados a la expresión escrita, también muy presentes en el aula de secundaria, tales como la comprensión lectora. He llegado a la conclusión, a través de esta investigación, de que si un alumno no comprende lo que lee, difícilmente podrá interpretarlo correctamente por escrito, puesto que las dificultades en expresión escrita no sólo dependen de los errores localizados en el código escrito, de índole gramatical, ortográfica, o asociados a la adecuación, coherencia y cohesión textual, sino también del contenido. He podido comprobar, que para que un alumno pueda expresarse correctamente por escrito, debe llevar a cabo una planificación antes de producir el texto, reflexionando acerca de a quién o quiénes va dirigido el texto que va a redactar y con qué fin lo escribe.

En definitiva, me ha gustado mucho trabajar acerca de este tema, y al resultar, tal y como he afirmado, un problema tan extendido en las aulas de secundaria, lo he considerado de gran utilidad.